García-Baró López, Miguel

Una mirada sobre la educación ¿La competencia espiritual?: Opinión. - Madrid : Universidad Pontificia Comillas - p. 38-40

En principio, el término competencia espiritual tiene bastante, mucho incluso, de oxímoron. Primero, porque el espíritu, más o menos dormido, despierto o soñador, debe suponerse ya en todas las personas; segundo, porque el espíritu es justamente lo no cuantificable por excelencia, lo que por excelencia no se puede conocer desde fuera en nadie.